Tu negocio te necesita: Deja de Sobrevivir

En las empresas hablamos constantemente de objetivos, planificación, productividad, rentabilidad…
Pero rara vez nos preguntamos:

¿Cuánta energía me cuesta mantener este ritmo?
¿Dónde estoy sobrecargando mi atención o mi tiempo?
¿Qué precio estoy pagando por intentar llegar a todo?

Lo que muchas veces llamamos “estrés” o “agotamiento” es una señal de que tu sistema nervioso está sobrepasado.

Y cuando eso ocurre:

• Pierdes claridad.
• Tomas decisiones más impulsivas o las pospones por falta de energía.
• Se tensan las relaciones con el equipo.
• Te cuesta ver más allá del día a día.
Y entras en MODO SUPERVIVENCIA.

¿Qué significa entrar en “modo supervivencia” en un negocio?

Es ese estado en el que, aunque el negocio sigue funcionando, tú vas con el piloto automático puesto, sintiendo que todo depende de ti y que no puedes bajar la guardia ni un momento.

Tu día a día se convierte en apagar fuegos, resolver urgencias y aguantar hasta que acabe la jornada.

¿Te suena?

  • Te levantas ya cansado, con una frase en la cabeza: “No puedo parar ahora.”
  • Llegas al trabajo como si entraras al ring: con los guantes de boxeo puestos, listo para aguantar.
  •  En las reuniones estás presente… pero tu cabeza sigue resolviendo mil temas pendientes.
  • Cualquier nueva idea suena a más carga y a más cosas que gestionar.
  • Te enfocas solo en lo urgente, no en lo importante.
  • Las decisiones las tomas con prisa.
  • Pierdes la motivación que tenías al principio. Sientes que trabajas mucho… pero sin rumbo.

Ya no estás liderando, sino gestionando desde la urgencia, el cansancio y el “aguantar como sea”.

Las decisiones que tomas son para “salir del paso”. El miedo a que algo salga mal pesa más que la ilusión por hacer que algo funcione.

En definitiva, ya no puedes responder a los desafíos con todas tus habilidades y capacidades porque estás sobrepasado.

Lo que nadie te dices es que tú, no tienes la culpa de lo que te está pasando; no es que te falte voluntad, o no sepas, es que tu sistema nervioso, está desregulado, está sobrepasado. Es pura fisiología.

¿Qué significa tener un sistema nervioso desregulado o sobrepasado?

Tu sistema nervioso está desregulado cuando reacciona a situaciones cotidianas—como un cliente difícil, un contratiempo inesperado o una sobrecarga de trabajo— como si fueran amenazas reales. Es lo que sucede cuando funcionas en “modo supervivencia”: tu cuerpo entra en un estado de alerta constante, incluso aunque no haya un peligro real. Todo se vive con tensión, prisa o bloqueo.

Y esto afecta tu rendimiento:

  • Te cuesta pensar con claridad.
  • Tomas decisiones más para evitar problemas que para generar oportunidades.
  • Actúas por urgencia, no por estrategia.

Lo importante: Hay solución.

Este estado no es permanente. Se puede entrenar al cuerpo y al cerebro para volver a un punto de equilibrio.

¡Ojo! Equilibrio no significa estar SIEMPRE EN CALMA, sino tener la capacidad de sostener la intensidad de los desafíos sin desbordarse. Incluso en la incomodidad, puedes actuar con presencia, criterio y dirección.

Volver al EQUILIBRIO es lo que te permite:

  • Decidir con claridad.
  • Priorizar con foco.
  • Sostener la incertidumbre sin bloquearte.
  • Liderar sin agotarte.

Te dejo un ejemplo: Cliente difícil con quejas constantes

Situación: Un cliente llama por tercera vez en la semana, molesto, hablando en tono exigente y amenazando con cancelar el servicio.

Cuando tu cuerpo entra en modo alerta (desregulado):

Tu sistema nervioso interpreta al cliente como una amenaza. Automáticamente:

  • Se acelera tu respiración, se tensa el cuerpo.
  • Te pones a la defensiva, aunque no lo digas en voz alta.
  • Respondes con prisa, justificándote o intentando que se calle.
  • Pierdes capacidad de empatizar, escuchar y ver el panorama completo.
  • Tomas decisiones solo para salir del paso, en lugar de para resolver.

Es como si tu cuerpo dijera: “Aquí hay peligro. Sobrevive primero, piensa después.”

Cuando estás en modo conexión y presencia (regulado):

Tu cuerpo se siente seguro, incluso en el conflicto. Entonces:

  • Escuchas sin tomarlo como algo personal.
  • Mantienes el tono, la claridad y la calma.
  • Tomas decisiones con perspectiva, sin actuar desde el impulso.

Por todo eso digo, que tu libertad financiera empieza en tu sistema nervioso.

Porque no es posible construir un negocio rentable y sostenible si tú estás en modo supervivencia.
Y si lideras en piloto automático, desde la presión, la ansiedad o la tensión… tarde o temprano se refleja en los números.

¿Y si tu próximo presupuesto no solo cubriera lo necesario, sino aquello que permite a las personas, sostener el foco, recuperar la energía y mantener la dirección en medio de la presión?

Dedicar una partida concreta a cuidar tu equilibrio interno y el de tus empleados, para sostener la presión sin romperse, es una decisión estratégica que puede transformar la forma en que vives tu negocio.

¿Y si lo que te está bloqueando no es el negocio… sino el estado en el que estás liderando?

Como coach especializada en la regulación del sistema nervioso, a través de neurociencia, somática y liderazgo consciente, te acompaño a descubrir y activar los recursos que te permiten mantener tu equilibrio interno, tomar decisiones claras y liderar con confianza desde tu mejor versión.

¿Por qué todo esto importa?
Porque cuando tú estás bien, lideras mejor.
Y cuando lideras desde un lugar claro y conectado, tu negocio no solo funciona: vuelve a tener sentido.

Francis Ferrís Duart

Coach certificada

CEO DUART FERRÍS, SL

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